(Taylor Ballek | Spectrum Health Beat)

“¡Hola cariño! ¿Estabas esperando a que te viniera a visitar el día de hoy?”

Una estela de entusiasmo brota de Terri Price al momento en que saluda a Jordan de 8 meses, un hermoso niño de ojos azules que pasaba el rato con su mamá, Melinda Kurcharski, en su apartamento al sur de Grand Rapids.

Para pronto el pequeño Jordan se cuelga de los aretes de la señora Price e intenta comerse el gafete de ella.

“Oh cielos, lo adoro. ¡Míralo!”

Hace veinte años, Price encontró su trabajo de ensueño—y Jordan además de cientos de bebes son la razón por la cual ella nunca volvió la mirada.

Como promotora de salud certificada en Spectrum Health Healthier Communities, Price trabaja entre mujeres y bebés en poblaciones medicamente necesitadas del Condado de Kent, Michigan. Ella pasa sus días animando a mujeres embarazadas a superar sus dificultades, mimando a los preciosos recién nacidos y echándole porras a las nuevas mamás mientras ellas se empeñan en garantizar la salud y bienestar de sus bebés.

Los promotores de salud sirven como entrenadores  y ayudan a la gente a permanecer saludable, indicó José Reyna, Maestro en Administración Pública y director de los programas de salud para la comunidad. También son los ojos y los oídos de los prestadores de servicios médicos en la comunidad.

El trabajo puede ser demandante pero a Price le viene como anillo al dedo.

“No lo veo como un trabajo” dice ella. “Más bien lo veo como ser un agente de cambio en las vidas de la gente. Esa es mi pasión.”

“Es fenomenal,” dijo Reyna. “Para ella el percibir lo que alguien necesita e incluso cómo hablarle a cualquier persona, se ha vuelto intuitivo, e influir para que las personas compartan cosas que quizás no comparten con nadie más.”

Price, quien también es una doula certificada (una asistente al parto), es una de ocho promotoras comunitarias que traban en el Programa de Salud Materno Infantil de Spectrum Health, que tiene como objetivo reducir la mortalidad infantil y ayudar a los bebés a comenzar bien.

Healthier Communities también emplea promotores de salud certificados en sus programas para servir a los niños en situación de vulnerabilidad médica, asistir a en las escuelas a niños con enfermedades crónicas, y ayudar a los adultos en situación de riesgo a prevenir y control afecciones crónicas. Los programas se ofrecen en inglés y español.

Health Beat acompañó recientemente a Terri mientras hacía visitas a sus clientes.

Primera visita: María y su bebé Jorge

Jorge probablemente ni cuenta se dio de que era su primer cumpleaños, pero estaba con ánimos de celebrar—bailando, sonriendo, coqueteando con los adultos en el salón mientras cambiaba de juguete en juguete.

“¿Acaso no es bellísimo? “Dijo Price. “Hola guapo. Mira que bien te ves.”

(Taylor Ballek | Spectrum Health Beat)

Su madre, Maria Webster, también estaba muy de buenas. Su esposo, Brent, recién había encontrado empleo, su bebé se veía saludable—y aun le esta lactando—además, ella acaba de enterarse de que le pueden extender el servicio del Programa de Salud Materno Infantil por un año más si ella así lo desea.

Eso significa un año extra de visitas con Price y su colega, Kayla Johns, una trabajadora social de Spectrum Health.

“Me puse tan feliz cuando me dijo que me podrían apoyar por un año más,” dijo Maria. “¡Todavía podremos vernos!”

Maria dijo así con lágrimas agridulces en los ojos al tiempo  que recordó sus batallas como inmigrante y sin una robusta red de apoyo  y en medio de un embarazo no planificado y padeciendo depresión. El equipo de  salud materno infantil se convirtió en su sustento.

“Cuando se me pone difícil, ellas están a mi lado ya sabes como es.” Dijo. “Las mujeres que trabajan en el programa, son fantásticas–maravillosas.

Price le brindo palabras de aliento, la escuchó y la vínculo con recursos en la comunidad, como lugares en los que las familias beneficiarias de Medicaid pueden obtener pañales y verduras frescas a precios económicos. Mientras tanto, Johns ofrece apoyo emocional y hace lo necesario para que Maria reciba tratamiento para su depresión.

“Es raro encontrarse a gente como esta,” dice Maria, explicando que se siente aislada y padece discriminación en Grand Rapids debido a su origen étnico y acento.

“Por lo tanto, encontrar a gente como ellas es como, guau, me hace sentir—no tiene nada que ver con mi raza, ¿sabes? Porque soy una persona, soy un ser humano. Así es como ellas me hacen sentir.”

Price no pudo contener las lágrimas al oír las palabras de Maria.

“No sabía hasta hoy todo esto que lleva dentro de ella,” dijo Price, al mencionar que este es el perfecto ejemplo del valor de los trabajadores de la salud en la comunidad.

(Taylor Ballek | Spectrum Health Beat)

“Es el impactar la vida de las familias que apoyamos cuando no hay nadie más que lo haga. Esto me alegró el día.”

Price visita a Maria dos veces al mes, y en este dia Maria rellenó un cuestionario sobre el desarrollo emocional y socila de Jorge a los 12 meses. El cumpleañero tuvo un resultado muy alto en su evaluación, pero Price vincula a las familias con servicios adicionales si el bebé parece tener retrasos en el desarrollo.

Price también habló con Maria sobre la planificación familiar—“porque el resultado de los embarazos  planeados son mejores cuando se planifican,” acertó.

Como muchas promotoras de salud e la comunidad, Price goza de credibilidad con sus clientas porque ella ha estado en los zapatos de ellas.

“Yo fui una de esas madres que experimento las mismas barreras que ellas tienen en sus vidas,” dijo. “Por lo tanto encuentran en mi a alguien que las entiende, sabiendo que soy parte de su comunidad y que tuve mis crisis en la vida.”

El secreto del trabajo sanitario en la comunidad, dice, es ver más allá de las necesidades de los clientes y  empoderarles, “hacerles saber que ellos pueden superar esas barreras.”

Segunda visita: Melinda y su bebé Jordan

Melinda, la madre presentada al inicio de esta historia, es una persona callada a quien no le gusta ser fotografiada. Pero ella está muy agradecida  con los servicios que ha recibido de Spectrum Health a lo largo del año pasado: visitas domiciliarias de la enfermera, la trabajadora social y de Price.

Melinda ha pasado tiempos difíciles, dijo Price, y está intentando hacer las cosas de la manera correcta por el bien de su nuevo bebé. Se le notaba muy orgullosa cuando le dijeron los resultados de Jordan en su evaluación de los 8 meses, Price la felicitó.

Al igual que con sus otras clientas, Price se dio la oportunidad de conocer a Melinda desde el principio.

“Para que la gente se dé cuenta de que le importas, necesitas mostrar que te importa y encontrarlas en su situación real,” dijo.

“Nuestra meta es establecer esa relación, y una vez que se dan cuenta de que estas ahí por ellas, se vuelven materia dispuesta.”

Una vez que la confianza se establece, Price y sus clientas hablan de los desafíos en sus vidas, y juntas trazan un plan y se preparan para la vida con un  nuevo bebé.

(Taylor Ballek | Spectrum Health Beat)

La lista de asuntos Price encuentra con sus clientas es larga: salud mental, indigencia, cuidado de niños, lactancia, salud dental, búsqueda de empleo, educación, transportación, asistencia alimentaria, Medicaid, las visitas al médico, planificación familiar.

“Vemos de todo,” dijo. “Cada caso es distinto. Y también es lo bueno del trabajo—ver de todo.” Siempre dispuesta a dar un abrazo, Price es de una presencia animada a dondequiera que va.

“Conmigo, lo que ves es lo que hay, y eso mismo le digo a mis clientas, soy extrovertida, perdón…Si no estás acostumbrada a alguien así tan entusiasta, alguien que va a tratar de echarte porras, entonces no soy la persona adecuada para el caso.”

Tercera visita: Voniesha y su bebé Jayden

Voneisha Reeves, la última clienta del día para Price, llego a su apartamento justo a tiempo, justo después de su trabajo de limpieza en Spectrum Health Blodgett Hospital.

No podía esperar para decirle a Price la buena nueva—ella recién había recibido un ascenso en el trabajo. Y le da el crédito a Price por ayudarla a mantener la actitud que hizo este logro posible.

“Inmediatamente pensé en ti,” le dijo a Price. “Pensé, Miss Terri siempre me dice, necesitas ser paciente y orar todo llega a su tiempo.”

Price estaba eufórica: “¡Voniesha! Mujer, estoy tan impresionada. ¡Cielos, me siento como nube el día de hoy.

Voniesha ha avanzado mucho desde que conoció a Price, temprano durante su embarazo. En esa ocasión, acababa de romper con el padre del bebé y, en sus propias palabras  “era un desastre.”

“Eran emociones por todos lados, no saber cómo iba a mantener a mi bebé, y lo superé, pero no veía la luz,” comentó. “Terri me ayudó mucho durante ese periodo tan horrible.”

Después todo empezó a resolverse a su favor. Encontro el trabajo en el Hospital Blodgett, encontró a un buen médico para ella y su bebe, se vinculó con un grupo de apoyo para la lactancia con la ayuda de Price, y recuperó la confianza en sí misma.

Hoy en día el bebé Jayden es un feliz y saludable chico de 9 meses, y ya está caminando. La madre y la hermana de Voniesha le ayudan a cuidarlo, y está muy ocupada planificando su futuro.

¿Su sueño? Convertirse en una promotora de salud en la comunidad como Price.

“Quiero dar de vuelta a alguien más que se encuentre en la situación en la que yo me vi,” dijo. “Siento que, como pasé por ahí, puedo relacionarme con alguien más. Me ha pasado, lo he hecho, y entiendo de donde viene.”

Según Price, no es la única que ha seguido ese camino.

“Me parece que cuatro de mis clientas han encontrado empleo (como promotoras de salud en la comunidad) en Spectrum Health. Querían hacer lo que yo hago,” comentó. “¡Es fantástico!”

(Taylor Ballek | Spectrum Health Beat)

También tiene clientas que han vuelto a la Universidad y se han terminado sus carreras profesionales.

Con el apoyo adecuado y a su debido tiempo, estas mujeres “son capaces de hacer sus sueños realidad,” dijo Price.

“Lo que sea que hayan querido lograr en sus vidas, nunca es demasiado tarde.”

Ver que las vidas de mucha gente han cambiado radicalmente mantiene a Price al frente de batalla como promotora de salud en la comunidad.

“Es muy gratificante,” dijo. “no cambiaría este trabajo por nada en el mundo.”